Los operativos están pautados para este próximo domingo, 23 de julio, y se espera que continúen hasta el miércoles, 26 de junio, en todo el país, según un memo interno obtenido por la agencia Reuters. Los jóvenes en la mira de ICE tienen entre 16 y 17 años.
Agentes migratorios en Estados Unidos planifican operativos nacionales la próxima semana para arrestar, entre otras personas, a adolescentes que entraron al país sin compañía adulta y que se sospecha son miembros de pandillas o maras, en una ampliación del endurecimiento migratorio del presidente Donald Trump contra los indocumentados.
Los operativos están pautados para este próximo domingo, 23 de julio, y se espera que continúen hasta el miércoles, 26 de junio, según un memo interno obtenido por la agencia Reuters. Los adolescentes en la mira tienen entre 16 y 17 años.
Los operativos representan un fuerte desvío de las prácticas migratorias del expresidente Barack Obama. Bajo su administración, los menores podían ser buscados para la deportación si habían sido condenados de un crimen, pero no arrestados simplemente por sospechas de que fueran pandilleros.
El Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) dijo en una declaración que alguien puede ser identificado como pandillero si cumple al menos dos criterios, entre ellos tener tatuajes de maras, frecuentar áreas notorias por actividad pandillera y utilizar ropa de pandillas.
La agencia no comenta sobre planes futuros de operativos, pero afirmó que se enfoca en deportar a individuos que presentan una amenaza a la seguridad nacional y a la seguridad pública.
El memo que instruye a las oficinas de campo de ICE a prepararse para los operativos fue escrito el 30 de junio. Un funcionario del Departamento de Seguridad Nacional confirmó este viernes a Reuters que los operativos estaban pautados para la semana que viene, aunque afirmó que ICE puede cambiar sus planes.
Trump, quien prometió en su campaña endurecer las políticas migratorias de Estados Unidos, ha priorizado la deportación de pandilleros, en especial de miembros de la Mara Salvatrucha, o MS-13, de El Salvador.
"Hay una pandilla llamada MS-13. No les gusta dispararle a la gente. Les gusta cortar a la gente. Hacen cosas que nadie puede creer", dijo Trump en un mitin en Cedar Rapids, Iowa, el mes pasado. En un discurso en mayo, el presidente prometió que la mara "se irá de nuestras calles muy pronto, créanme".
'Esto es preocupante'
Aunque los menores indocumentados pueden ser deportados como los adultos, la ley de inmigración de Estados Unidos estipula que los menores que llegan a la frontera sin padres o guardianes son particularmente vulnerables y les concede protecciones adicionales.
Los niños que entran al país sin acompañantes adultos pasan a la custodia del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), que los coloca en hogares de adultos que acceden a cuidarlos, usualmente familiares viviendo en Estados Unidos.
Las agencias de seguridad de Estados Unidos mantienen datos sobre individuos sospechosos de tener afiliaciones a pandillas, pero estas listas han sido criticadas por grupos de derechos civiles.
Marielena Hincapié, directora ejecutiva de la organización National Immigration Law Center en Los Ángeles, aseguró que estas bases de datos frecuentemente tienen información incorrecta.
"Esto es preocupante en varios niveles", afirmó Hincapié sobre los operativos de ICE. "Por un lado, las listas de pandilleros en lugares como California están repletas de errores. Hemos visto bebés etiquetados como posibles pandilleros".
David Leopold, un abogado de inmigración del bufete Ulmer & Berne, asegura que niños inocentes podrían ser detenidos en los operativos.
"En muchos casos, los niños no deciden unirse a una mara por su propia voluntad. Son amenazados por mareros y son forzados a hacerse tatuajes de la mara si viven en ciertos vecindarios", dijo.
Los operativos pautados para la semana próxima también se enfocarán en padres que llegaron ilegalmente con sus hijos y tienen órdenes finales de deportación, y además en inmigrantes que entraron como menores no acompañados y ya han cumplido los 18 años, apunta el memo.
El documento dirige a las oficinas de campo a identificar a personas en sus áreas que cumplen con esos criterios.
La administración de Obama se enfocó en esos dos mismos grupos durante redadas que sucedieron en 2016 y que buscaban desincentivar los cruces de la frontera por parte de familias y menores, que se dispararon en 2014.
Sin embargo, Obama dio órdenes a los agentes migratorios de priorizar la deportación de solo aquellos que habían cometido crímenes serios o habían entrado al país recientemente.
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